DANZA Y SALUD MENTAL
DOI:
https://doi.org/10.51891/rease.v11i11.22390Palabras clave:
Bailar. Salud mental. Ansiedad. Depresión. Estrés.Resumen
Este artículo analizó la importancia de la danza en la promoción de la salud mental, especialmente en la lucha contra la ansiedad, la depresión y el estrés. La investigación se desarrolló en base a estudios y autores que abordan la relación entre el movimiento corporal, la emoción y el bienestar psicológico. Se ha observado que bailar ayuda a liberar hormonas ligadas al placer y la felicidad, como la serotonina y las endorfinas, y también mejora la interacción social, el estado de ánimo y la autoestima. Además de contribuir al bienestar físico, el baile favorece el equilibrio entre cuerpo y mente, siendo una práctica accesible, divertida y capaz de mejorar la calidad de vida. La práctica regular también permite a las personas expresar emociones reprimidas, desarrollar la autoconciencia y fortalecer la resiliencia emocional. La danza puede incorporarse a las escuelas, comunidades y programas de salud como herramienta preventiva y terapéutica, promoviendo la inclusión y la integración social. Por lo tanto, se entiende que la danza puede ser utilizada como una herramienta importante para cuidar la salud mental y fortalecer los vínculos sociales en diferentes contextos, siendo capaz de impactar positivamente tanto en aspectos psicológicos como físicos y sociales.
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