FEMINICIDIO: LA INEFICACIA DEL ESTADO LO PERMITE

Resumen

El feminicidio, crimen que en muchas ocasiones representa el acto final de una cadena de violencia doméstica y motivado por razones de género, ha alcanzado índices alarmantes en el escenario brasileño. El hecho de que Brasil ocupe la quinta posición en el ranking mundial de violencia letal contra las mujeres, según datos de la Agencia Patrícia Galvão, refuerza la constatación de que el Estado brasileño, a través de sus acciones para combatir el feminicidio, ha demostrado ser cada vez más ineficaz, ya que no logra proteger a las víctimas, reproduciendo así un sentimiento de impunidad. Ante esta posición en el ranking mundial, se hace evidente que, aunque el Estado invierta en la creación de legislaciones para intentar proteger a estas víctimas, no logra tener éxito en esta tarea. Cuando el Estado dirige sus esfuerzos a hacer que el agresor pague por su crimen, termina generando una falsa sensación de seguridad y protección estatal, con el objetivo de mantener un orden social, mostrando a la sociedad que se preocupa por esa mujer y que trabaja en su favor, siendo la realidad muy distinta de todo eso. El objetivo de este trabajo es demostrar, a lo largo de su desarrollo, la falibilidad del Estado en su misión de proteger y acoger a estas víctimas. Para ello, se hace uso de autoras contemporáneas como Soraia Mendes (2021) y del estudio que realizó para la propuesta de su libro Feminicidio de Estado, así como de investigaciones en artículos documentales sobre el índice de violencia contra la mujer del IPEA y del Atlas de la Violencia, además de la legislación brasileña, como el uso de las Leyes nº 11.340/2006 y nº 14.994/2024.